Me he decidido por esta emotiva y agridulce película. La he visto varias veces y me parece que tiene un encanto especial. Por eso voy a compartirla con vosotros. Para que la recordéis los que la hayáis visto y para que la veáis los que la tenéis pendiente.
Un chico valiente. cambia los guantes de boxeo por las zapatillas de ballet
Primer largometraje del director Stephen Daldry, después de dedicarse al teatro se atrevió con el cine y, con tan solo tres largometrajes, “Billy Elliot”, “las horas” y “el lector”, ha recibido números premios y ha sido candidato al Óscar en tres ocasiones. Su nuevo proyecto será la adaptación de una novela sobre el 11-S, donde también tendremos como protagonista a un niño.
Como anécdota contaros que este curioso director confeso una vez:
‘Soy totalmente gay, pero tengo sexo con una mujer y crio niños en una familia tradicional’.
Nada de echarse las manos a la cabeza. El británico ni se ha sometido a una dieta espiritual milagrosa para curarse de vicios machos ni pretender borrar de un plumazo el párrafo más importante de su vida. Y no os diré que juzguéis el paso que ha dado, sólo pretendo exponerlo porque me parece una curiosidad de este director, igual que cuento cosas de otros directores y, porque en la película existe una sensibilidad especial y trata el tema de una manera que a mi me parece estupenda. Stuart Wells, que no había actuado nunca antes, interpreta al mejor amigo de Billy Elliot. Billy lo acepta como amigo, independientemente de su condición sexual, pese a que se enterá después.
Una escena muy emotiva
Con un guión de Lee Hall, la inspiración para el guión fue elaborado, en parte, de la novela de AJ. Cronin “las estrellas miran hacia abajo”, que también se encuentra en una comunidad de la minería del carbón Inglés durante una huelga. El modelo de Billy Elliot se inspiro en el famoso barítono Sir Thomas Allen que provenía de un fondo similar, habiendo nacido en el condado noreste de Durham.
Ambientada en los años 80, Billy Elliot, Interpretado por Jamie Bell, es un chico inglés que tiene un sueño: ser bailarín de clásico. Se va a encontrar con una serie de dificultades que nos emocionan y conmueven. Nos hacen ver otra realidad, lejos de estereotipos. Billy Elliot no quiere boxear, le gusta el ballet ¿Qué os parece? una historia nada ficticia donde un muchacho quiere llegar a cumplir un sueño ¿Cuantos sueños se han quedado en el camino de muchos?, unos por el que dirán y otros por ni siquiera intentarlo, por pensar que no se va a lograr nada y es mejor desistir.
Este plano es de los que transmiten todo
Es una película que comienza mostrándote esa ilusión por el baile, los famosos saltos de Billy al poner el disco de “electric Warrior” nos presagian un buen comienzo.
Y este Billy no para de bailar y saltar
Una comunidad de clase obrera y con mentalidad puritana, hacen que Billy choque constantemente con ellos. Si añadimos la casi caótica vida familiar por la falta de la figura materna, entendemos perfectamente a Billy. No solo le comprendemos si no que también le queremos. A pesar de todo, a su familia también se la entiende y se la coge cariño, al fin y al cabo no deja de ser una familia que solo quiere lo mejor para los suyos. Aquí no hay antagonistas más que ellos mismos consigo mismos. Luchas interiores por conseguir sueños, por aceptar los cambios, por asumir perdidas y por aceptar la vida que a cada uno les ha tocado.
En esta película, el protagonista se atreve a ir a por todas, pese a sus miedos y las dificultades, lucha por conseguirlo ¿lo conseguirá? Para eso hay que ver la película amigos. Rompe con el boxeo, que según todos era lo correcto para un niño de su edad y se atreve con el ballet. Un ballet que todos consideraban “un baile de maricas”.
Soy uno más
La historia se gesta en una situación bastante complicada, donde existe un fuerte conflicto en el sector minero. Esta situación agrava aún más la historia y la hace más interesante. Es una lucha constante y un sufrimiento de todos los personajes. La huelga y la falta de dinero, hacen que los nervios estén a flor de piel.
Siempre luchando
Los personajes están muy bien interpretados por unos estupendos actores. Jamie Bell, interpreta a Billy y nos transmite mucha fuerza y una gran sensibilidad, muy buena actuación de este adolescente de 14 años. Ya tomaba clases de danza desde los 6 años y lo mantuvo en secreto hasta que fue elegido para interpretar a Billy Elliot. Al no llegar a conocer a su padre, Jamie se apoyo en Daldry, director de la película, y este lo trato como un hijo. A partir de esta película, ha interpretado muchas más y ha participado en numerosos vídeoclips. Gano un premio Bafta como mejor actor.
Y sigue saltando y bailando, ¿lo llevará en la sangre?
Gary Lewis, interpreta al padre de Billy. Este actor, nacido en Glasgow, no le fue muy bien con los estudios y fue su hermano quién le impulso a estudiar para ser actor. Comenzó en teatro a los 32 años y fue entonces cuando empezó su carrera de actor. Gary Lewis hace una buena interpretación en esta película, tiene gestos verdaderamente naturales, de cualquier padre en apuros que solo quiere lo mejor para sus hijos. Una actuación muy grata y emotiva. Sobre todo en algunas escenas puntuales. Si recordáis, este actor también aparece en la película Gangs of New York.
Fabulosa escena, aquí la interpretación es magistral
Otra interpretación que merece ser considerada es la de Julie Walter, interpreta a la profesora de Billy, la Sra Wilkinson, esta actriz y novelista británica fue candidata a los Óscar y también ganadora del premio Bafta como mejor actriz de reparto. En esta película hace una interpretación de diez.
Una mujer con mirada nostálgica
Entre otras buenas interpretaciones esta la del hermano de Billy, interpretado por Jamie Draven. La entrañable abuela de Billy, interpretada por Jean Heywood y el amigo de Billy, interpretado por Stuart Wells, del que ya hemos hablado anteriormente.
Gran carga emocional. Muy bien narrada y ambientada. Los diálogos no son excesivamente largos pero dicen mucho, para mi, mejor así. Los silencios y el ritmo están en su punto, como diría un chef. Daldry ha sabido conjugar un drama social con un drama personal, donde todo fluye de manera natural y con un claro objetivo, un futuro mejor.
El director en pleno rodaje
La música en esta cinta esta muy bien empleada en cada momento. Grupos como The Clash o The Jam en puntuales ocasiones, grupos preocupados por los asuntos sociales, laborales y políticos de su país. Toda la banda sonora esta muy bien escogida.
Es una película de aprendizaje y de reflexión, donde nos ponemos en el lugar del personaje, más bien, de todos los personajes. Todo parece tan real que lo sientes y lo entiendes. Os la recomiendo.